La elección de los materiales para iniciarse en el mundo de las plastilinas frecuentemente genera cierta curiosidad y muchas dudas, porque de entrada se asume que siempre se usan materiales “especiales”, y aunque estos últimos ciertamente existen en el mercado y con suerte en un futuro también los probarás, para empezar, no debemos complicarnos ni ir tan lejos para conseguir lo que necesitamos.
Ilustración:
En este primer post te cuento algunos tips que espero te sirvan, para conseguir tus primeras plastilinas, o una mas conveniente.
Como sé que en este momento puedes estar en cualquier parte del planeta y seguramente las marcas y empresas comercializadoras cambian según el lugar, quiero ayudarte a reconocer las características generales de las plastilinas que te conviene elegir sin importar el nombre ni donde te encuentres… de momento no saldremos a buscar marcas, sino cualidades y características. De este modo no sacaremos de nuestro radar incluso posibles nuevos productos que aun no conocemos y que pudieran estar empezando a circular en nuestras ciudades o pueblos.
Buscaremos en nuestras plastilinas estas caracteristicas generales, recordando que por ahora nos estamos centrando en plastilinas corrientes, de las que usabamos cuando niños en el kinder :
Textura:
Al tacto debe ser relativamente seca.
La plastilina está hecha de materiales grasos, por lo cual siempre tendrá un grado de “humectación” que la mantiene flexible, pero no debe ser pegajosa ni conviene elegir una que al tacto sientas que este material graso está “alrededor” de la plastilina haciendo una capa que deje tu dedo “brillante”. Este tipo de plastilina, que está saturada de “liquido” tiende a ser pastosa y requerirá de un proceso previo para que puedas trabajarla, lo cual no sería lo ideal si tu intención es empezar cuanto antes a experimentar.
No debe ser grumosa ni reseca.
Existen tres componentes principales en las plastilinas que actualmente se consiguen en el mercado que dan una textura especial a cada una y conviene conocerlos para entender la diferencia al tacto entre unas y otras, acá las defino de forma sencilla:
1. Las plastilinas a base de aceite, que son las de toda la vida, con la que crecimos.
2. La plastilina a base de parafina: es especialmente suave y más "sedosa" que la anterior. Al tacto recuerda la textura de la esperma de vela, -si alguna vez tocaste este liquido caliente y empesó a secarse en tu dedo en una fina capa, tendrás una idea de la textura de la que hablo-. Con esta logran sacar gamas cromáticas muy interesantes.
3. La plastilina a base a cera de abejas, que también es suave, "lisa", muy manejable. Esta podríamos decir que se encuentra en un punto medio de las dos primeras.
Por lo general tanto la que es "parafinada" como esta última resultan muy efectivas para cuando queremos borrar las huellas al final del trabajo y para ser alizada con los dedos o a picel.
Todas nos servirían si cumplen con el resto de los puntos que te seguiré contando a continuación.
Consistencia:
La plastilina conviene que sea firme, aun siendo suave.
Conviene que tenga un mínimo de resistencia al tacto, que se sienta compacta.
No debe manchar: en algunas marcas solo unos colores manchan un poco, en otras ninguno, y en otros casos casi todos los colores o se quedan pegados a nuestros dedos como si fueran una pintura pastosa o una masa demasiado suave, mientras otras tantas dejan rastros de color difíciles de quitar rápidamente de nuestras manos, entorpeciendo el proceso del modelado. Asegúrate de evitar (siempre que puedas) plastilinas con estas ultimas características.
Cuando hagas contacto con cada plastilina antes de comprarla, imagínate intentando hacer detalles muy pequeños, convencido desde luego que desarrollarás las habilidades necesarias para hacerlo, e intenta visualizar si ese material te permitiría hacer eso que imaginas. Es un primer ejercicio instintivo que quizá te resulte. Si la consistencia no es la adecuada, pensando en el “para qué” quieres ese material, te darás cuenta si tiene posibilidades de funcionar para el modelado o no. (esto funciona especialmente cuando tienes la experiencia previa del modelado, pero no descarto las posibilidades innatas dormidas en ti, que pudieran despertar en cualquier momento para guiarte).
Materiales como plastilinas a base de harina, plastidedos, Play Doh etc, no son buenas opciones para el trabajo que nos espera, por lo cual no aplican para que te inicies en el diseño de figuras, aunque resultan fantásticas para los primeros pasos del desarrollo psicomotor y de la creatividad y las destrezas manuelas de niños en edad preescolar, o adultos estresados :) .
Plasticidad
Algunos conceptos se tocan al punto de ser muy similares. Con plasticidad, quiero referirme a la capacidad del material a ser estirado sin "romperse" (hasta cierto punto desde luego), a la estabilidad que consigues luego de hacer una forma y que esta permanezca tal cual sin caerse fácilmente y a la capacidad real que tiene de ser modelada y ser llevada al “extremo”.
La plasticidad depende de los dos primeros factores que comenté anteriormente pero es una característica que solo podemos comprobar poniendo manos a la obra y observando. En el caso de la plastilina, obviamente la permanencia de una forma tiene que ver con la plasticidad pero también responderá a factores de temperatura del lugar donde trabajes o donde colocas tus piezas terminadas, así que de momento solo me refiero a la cualidad del material y no a factores externos.
Color:
El color de las plastilinas es un asunto importantísimo! Pilas con eso!
Un buen trabajo puede verse realmente opacado por un mal empleo del color.
Las plastilinas que elijamos deben tener colores brillantes, vivos y “puros”. La "pureza" del color en plastilina es relativa, pero conviene que sean lo mas vivos posible para que nos permitan mezclar y crear nuevos colores que a su vez no sean opacos, de ahí la importancia del color original de cada una.
Ahondaré más adelante en el tema del color por tratarse de algo muy importante, pero recuerda: Colores alegres, vivos! Eso puede hacer la diferencia en tus figuras y puede ser un gancho inmediato para que consigas tener un efecto positivo en el espectador.
Existen marcas de plastilinas que tienen, lo que yo llamo “Colores especiales”. Por ejemplo, acá en Venezuela una marca saca unas cajitas con barritas largas con colores casi fluorescentes, estridentes o como le llamen en cada lugar ; ) . Comprar una cajita de esos colores ya sea para usarlos en detalles o para mezclarlos con los colores regulares para darles más vistosidad es una opción interesante.
Puedes probar comprando cajitas pequeñas o presentaciones pequeñas de las plastilinas que consideres que pueden cubrir estas necesidades, pero solo el probarlas te dará una idea clara si estas frente al material que buscabas.
Si consigues colores individuales y no sabes cuales elegir, te recomiendo Comprar: Amarillo, azul, rojo, blanco y negro. De allí puedes generar cualquier otro color. Por lo general se compra e doble de blanco porque siempre es útil tener suficiente.
Roger Pereira.